16 de enero de 2016

#33

Y casi sin darme mucha cuenta, escondido entre la rutina del día a día, las fechas señaladas, las sorpresas, imprevistos, alegrías y tristezas, las personas con las que comparto la vida, las nuevas, las que ya no están, las que han querido quedarse. Con todo lo que he hecho y lo que me queda por hacer, resulta que he cumplido los 33.

¡Wala 33!, la verdad es que a mí me suena a bastante y sin embargo me sabe a poco, mucho por todo lo que ya he conseguido en la vida y a penas nada, por todo lo que aún me queda por hacer, ver, descubrir, sentir…
Si pienso en cómo yo creía que sería a esta edad, la verdad es que me hace gracia, en fin, al menos toda una mujer de 33 años, con su trabajo, casada y ya con algún hijo, ¡jajajajaja, ay que me da!

Lo primero es que mujer, mujer, bueno, aun no es que me sienta, a ver, soy una mujer, pero física y psicológicamente me veo y me siento aún como chica, no niña, pero tampoco una adulta, quizás no como lo que es para mí una mujer adulta, más bien ahí ando en el límite de la eterna adolescente, aunque sí que he madurado en bastantes aspectos de mi vida, pero no del todo, yo me entiendo.

Sigo siendo igual de intensa que a los 17, trágica y teatral, todo es muy importante, aunque sea el vuelo de una mísera mosca, me sigo poniendo paranoica ante muchas situaciones y me adelanto a todo, y si… ay, pero es que y si… vamos, que soy una auténtica “Drama Queen”.

Me he repetido hasta la saciedad que debo tomarme las cosas con más calma y darle a cada cosa la importancia que realmente tiene, además de no adelantar acontecimientos, mientras yo haga lo correcto, o de todo de mí o intente cualquier cosa, que lo que tenga que ser será, tengo que dejar de montar tanta película en mi cabeza, dejar de ponerme tan nerviosa con todo, la verdad que soy excesivamente maniática y obsesiva, y eso queridas amigas tengo que cambiarlo, sé que necesito madurar aun mucho muchísimo.

Es como cuando tienes un problemón a cierta edad y después con el tiempo piensas, pero bueno, qué tontería y lo mal que lo pasé. Pues yo no aprendo, a mi me sigue pasando, porque me preocupo con la misma intensidad por absolutamente todo y así yo no sé cómo no me ha dado ya un “jamacuco”. No soy más inquieta porque no soy más alta.
Lo del matrimonio tampoco ha ocurrido aun, pero sí que tengo al Rey de mi casa y pase lo que pase ya puedo decir que he conocido lo que es el verdadero amor en esta vida. Ya os he hablado en otras entradas de él, estoy colada y nos hacemos felices que es lo importante. También vivimos juntos y aunque la casa no sea nuestra, ya que estamos de alquiler, la siento como mía, supongo que eso que dicen de que donde tienes el corazón tienes el hogar, en mi caso es cierto. He disfrutado y aún lo hago, amueblando y decorando, me encanta tenerlo todo limpio y ordenado, cocinar, poner, cambiar, etc. En definitiva jugar a las casitas en nuestro nidito de amor.

Tiene sus cosas buenas y malas, tenemos la tranquilidad de no estar amarrados a una hipoteca, palabra que aterra, aunque por otro lado a mis recién estrenados 33 años, sigo sin ser propietaria de nada importante, porque a lo de no tener casa, añadimos que tampoco tengo coche, ya que me mudé cerca del trabajo para no tener que estar interminables horas buscando aparcamiento, con el coche de mi padre, que era el que usaba antes.

En definitiva, que otros detalles de adulta que no cumplo, obligaciones económicas importantes de casa y coche, va a ser que no, risas mil.
Hablando de cosas de adulta, el trabajo empieza a ser importante cuando piensas en tu futuro, cuando te preocupa más cuánto vas a cotizar que cuánto vas a ganar, bueno y también te preocupan las facturas a pagar, tu vida laboral, etc.

Desde que empecé en la universidad he estado trabajando en un montón de cosas, he sido camarera, niñera, teleoperadora, maestra en distintos cursos y actividades escolares, profesora particular, monitora de gimnasio de muchas clases distintas, y un larguísimo etc… porque siempre me ha gustado buscarme la vida y manejar mis ahorritos mientras estudiaba, aunque nunca me ha faltado nada en casa y mis padres han podido darme todo lo que he necesitado y más, me gustaba aprender por mi misma y con esfuerzo el valor de las cosas.

He tenido la suerte de pasar por la Universidad, primero Derecho y luego Pedagogía, pero por unas cosas y otras y como ya os he comentado, las vueltas de la vida me colocaron trabajando de mi hobbie, aunque me preocupé de estudiar y sacarme los títulos necesarios para desempeñar bien mi tarea, lo que me ha llevado a estar trabajando de entrenadora personal, nutricionista y monitora deportiva durante varios años, más concretamente los últimos 3 años y medio.

Pero resulta que la vida y sobretodo mis estudios y mis ganas de seguir adelante me han dado la estupenda oportunidad de darle otro cambio radical a mi vida, así que con muchas alegrías y algunas tristezas cierro esta etapa de trabajo físico y comienzo con toda la ilusión del universo a trabajar con la inteligencia. ¿Y a qué me refiero con esto? Pues que el 2016 y estos preciosos 33 me han traído un nuevo trabajo donde me puedo desarrollar intelectualmente, ahora y espero que por mucho tiempo soy una feliz administrativa en una gran empresa, mejores condiciones laborales y personales, ya que he ganado entre muchas cosas calidad de vida.
Es cierto que no tiene nada que ver con lo que hacía y que no sé qué va a pasar más allá de la finalización del contrato, pero este salto al vacío que me ha sacado de mi zona de confort, ha roto muchos de mis miedos y ha subido varios peldaños en la escalera de mi autoestima, ya que a pesar de tener muchos estudios y experiencia aun no había tenido la oportunidad de demostrarme a mi misma de lo que soy capaz. Y que sea por el tiempo que sea (cruzar los dedos que sea mucho muchísimo) estoy feliz y mi vida ha cambiado a mejor y sé que este empujón me ha vuelto a colocar en la línea de vuelo para llegar bien lejos.
Así que por ahora y por fin, puedo decir (como lo llamo yo) que tengo un Trabajo de Adulto… ¡jajajaa!
Bss de color Violeta...

9 comentarios:

  1. A los 33 todavía se está "empezando". Te aseguro que te quedan muuuuchas experiencias y vivencias importantes que vivir todavía.
    Te lo dice una que espera nietos que tardarán mucho en llegar, jajaja.
    Saludos y felicidades por tu nuevo trabajo, seguro que te lo engulles.
    Maru

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Eugenia, siempre se está "empezando" es lo genial de la vida! Espero que pronto vengan esos esperados nietos, me paso por tu blog,
      Bss de color Violeta...

      Eliminar
  2. Hola
    Enhorabuena por lo que has conseguudi, aun se es joven y se tiene toda un vida la cual aprovechar cadi segundo
    Nos seguimos?? http://theredcoatgirls.blogspot.com
    Besos!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ey, gracias por pasarte y comentar, me paso por tu blog, encantada de seguirnos,
      Bss de color Violeta...

      Eliminar
  3. Bueno, 33..eres joven! hay que aprovechar la vida

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Claro! hay que hacer de la vida todo lo que se pueda y más!

      Bss de color Violeta...

      Eliminar
  4. Que pasada de post. Eres super graciosa e increíble. Espero verte por mi blog guapa y si te gusta te suscribas, me haría mucha ilusión. Un besazo.
    Lassietemaravillasdeamanda.blogspot.com

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ey, muchas Gracias, claro que me paso por tu blog a leerte, será un placer,

      Bss de color Violeta..

      Eliminar
  5. Hi Miranda, thanks for comment, i will go for your site to look and stay, sorry for my english XD

    Violet's Kiss...

    ResponderEliminar

Tu opinión siempre es Genial, Gracias ^^